Después de casi veinte años bregando por inculcar a los
alumnos el amor a los libros y tras casi cuarenta años ejerciendo de lector compulsivo, he llegado a dos conclusiones.
La primera de ellas es que se
puede vivir sin los libros; existe una vida más allá de la lectura… pero es una
vida más pobre, más limitada y, desde luego, más aburrida; una vida incompleta,
quebrada y quebradiza semejante a un puzle al que le falta una pieza. El mundo
actual ofrece muchas alternativas; pero todas son infinitamente menos
imaginativas.
La segunda conclusión es que existe tal cantidad y variedad de
libros que es imposible que no haya ni siquiera uno que no encaje con nuestros
gustos, que no nos ayude a ser mejores.
No leer es una opción suicida. Y si
algo lamento en esta vida es no disponer de muchos más años… habiendo tantos
libros como todavía quedan por leer y por vivir.
Y
PRÓSPERO AÑO NUEVO
Un abrazo,
queridos seguidores...
Me quito el sombrero, amigo. Felices fiestas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me resulta difícil imaginarme una vida sin libros, aunque sea un universo inabarcable. Su placer complementario, que he empezado a practicar hace casi once años, es escribir. Escribir para uno mismo, si se tiene pudor, o escribir para unos cuantos, como he venido haciendo en dos blogs seguidos. Mira esto que puse hace tiempo en mi blog.
ResponderEliminarhttps://albertogranados.wordpress.com/2011/12/16/mujeres-leyendo/
Ahí aparece una especie de manifiesto por la lectura, "dejarte abrazar", que escribí mucho antes.
Un saludo desde Granada,
AG